Ahora

Estoy sentada, sentada al lado de mi gato Rafael. 

Mi casa dejó de ser un lugar de alegrías y risas, dejamos de ver películas juntos, dejamos de ser eso, ahora todos monótonos cada uno metido en su laptop, cero compartir cero, todo.

Cada segundo que paso escuchando Holocene de Bon Iver, me da un aire de nostalgia, esta garuando fuerte afuera y yo te necesito, necesito ese bienestar que alguna vez sentí, eso de vivir realmente con todas las de ganar, eso de no vivir haciendo lo mismo, sino sintiendo felicidad y haciendote feliz.

No escribo para que leas esto, escribo por mí, porque así como de vez en cuando me dan ganas de escribir así de vez en cuando recuerdo lo que era tener tu apoyo.

Aun aquí, mañana es mi cumpleaños, debería estar emocionada, y en parte lo estoy, me alegra saber que pasaré un buen momento con mis amigos, ellos son todo para mi  al igual que mi familia.

Pero,

pero

pero

Cuanto me alegraría saber que algo de mi aun hay en ti y que nunca nos diste por vencidos, pero que va a ser, no se nada de lo que pueda ser. Pero, y ahí va de nuevo, siento que no hay nada, ahora al menos, de tu parte al menos, no sé que pensar. Aunque nostalgia haya de tu ausencia, sé que estoy mejor así, no se si mejor, pero si tengo más certeza de las cosas, cambios, cambios, cambio.

Quiero bienestar, sueno como una tarada, estoy bien y lo tengo, pero me gusta compartir todo, y ahora ya no tengo con quién y los domingos, los odio.

Tengo recuerdos llenos de todo, llenos de todo, llenos de nosotros.

Ahora paz interna, a eso aspiro; a que ahora soy una mejor persona que con el tiempo aprendí muchas cosas, que ahora sé controlarme más, aprendí mucho de ti, aunque no lo creas o yo no lo quiera creer. Que ahora soy un poquito más sensata que ahora sé lo que se siente que alguien se preocupe por ti, que quisiera saber como está tu familia y cómo estás tu, que si me necesitas o si no lo haces, solo para saberlo, no con fines a largo plazo.

Todo ocurre en cuanto escucho canciones como estas, de nostalgia, pero lindas a la vez, yo te quise como nunca quise y una pena todo esto, no odio a nadie, ni me gusta tener rencor, al final creo que hablo mucho y poco hago, porque daño no haría, pero si de volver a creerte se diera, creo que no lo haría, todo dependería de cuánto luchases por mi y de tu convicción, si es que en algún momento eso de verdad quisieras.

Aún me preocupo por ti.

Lo que más quiero es hacer las cosas y que mis días tengan un sentido más allá de ir a la universidad, comer, dormir, sonreír a todos, algo que me anime y me haga sentir menos este vacío que por momentos aparece.